DICCIONARIO Y ENCICLOPEDIA LUR, EN INTERNET





La Viceconsejería de Política Lingística ha colgado en Internet el Diccionario Enciclopédico Lur y la Enciclopedia Lur. El primero se público en papel en 1991 y la segunda, ocho años después. Su última actualización en formato impreso se realizó entre 2000 y 2001, pero hace tres años, antes de que pasaran a propiedad de Cultura, se revisaron una serie de datos básicos de ambas obras: reglas de ortografía de Euskaltzaindia, nuevas palabras, países y conceptos nuevos, acontecimientos relevantes recientes, etcétera.

La versión en la red del diccionario (www.euskara.euskadi.net/lur-hiztegia) vuelca los 10 volúmenes de la edición impresa entre 1990 y 1995, que suma más de 49.900 entradas, entre léxicas, enciclopédicas y mixtas.

La enciclopedia temática (www.euskara.euskadi.net/lur-entziklopedia)sumaba cinco volúmenes sobre Euskal Herria (Historia, Arte, Atlas Histórico, Geografía y Literatura) y otros ocho relacionados con cuestiones de carácter universal (Arte, Física y Química, Geografía, Ciencias Sociales, Historia, Ciencias Naturales, Literatura y Matemáticas). De ella se ha digitalizado tan solo el corpus que se ha podido consultar en su formato en papel.

Ambos trabajos se han colgado tal como eran, sin nuevas actualizaciones ni correcciones. No obstante, este año Política Lingística ha adecuado unos 11.000 artículos tanto del diccionario como de la enciclopedia Lur para poder publicarlos en Wikipedia.


FUENTE: EL PAÍS (29 MAYO 2012) 

LA MEMORIA VASCA (Antonio Elorza)



En relación al terrorismo, hay círculos de víctimas, y también círculos de responsabilidades. Para empezar, resulta obvio que el centro de la tragedia corresponde a quienes perdieron sus vidas o sufrieron daños –físicos o psíquicos- irreparables por efecto de la acción terrorista. El segundo círculo incluye a familiares y a allegados, que sobrevivieron para llevar la carga que pusieron sobre ellos los atentados. Pero hay un tercer círculo al cual se hace menos referencia: quienes durante años pudieron pensar con sobrados motivos que se encontraban en la lista de espera para ser asesinados. Tuvieron peor fama, e incluso renombradas plumas progresistas condenaron su exhibicionismo por declarar que llevaban escolta. ¡Menuda suerte y qué buen elemento de marketing! Cuarto círculo: toda la sociedad vasca, sometida a la intimidación de los violentos, con reacciones a veces dignas, en otras de sumisión, e incluso perversión de los propios valores.

Es el cuadro descrito admirablemente por Gutiérrez Aragón en su película Todos somos invitados, que subraya algo esencial para entender la cuestión vasca: el estrecho parentesco entre en nacionalismo sabiniano y el nazismo. Y que explica la reacción aparentemente extraña de reconocimiento mostrada por tantos vascos, otorgando sus votos a los socios políticos de unos terroristas, quienes han sido tan bondadosos que decidieron dejar de matar al verse acorralados policial y judicialmente.

Los círculos concéntricos de los responsables están presididos lógicamente por ETA, en sus dos vertientes complementarias, de organización encargada de matar y de su proyección política de las mil caras, Batasuna para entendernos. No existe duda alguna al respecto, del mismo modo que tampoco debe ser olvidarse el terrorismo de Estado. Al enfocar este tipo de problemas, no cabe renunciar a la búsqueda de una visión total, sin amputaciones, pero no para producir una amalgama, como buscan los amigos de ETA, sino para ponderar los juicios. Y ETA es bajo todos los aspectos el protagonista indiscutible. De ahí que la construcción del relato en torno a ETA sea hoy el principal caballo de batalla, con la habitual disposición de fuerzas: monolítica en la izquierda abertzale, en formación dispersa para los demócratas. Entra aquí en juego la responsabilidad del PNV, que llevó hace días a su exdirigente Emilio Guevara a estallar denunciando el papel desempeñado por los jeltzales.

Aun cuando el PNV no fue nunca filoterrorista, si tendió siempre a un discurso dual, frente a la “violencia” (sic) de ETA, al que acompañaba una condena de la política “de Madrid”, con lo cual sin ser justificado el terror, sí venía a ser explicado, edulcorado. “ETA es el adversario, España es el enemigo” (Egibar). Salvo excepciones, en el aislamiento de las víctimas, futuras y sobrevivientes, el colectivo nacionalista desempeñó un papel básico en zonas rurales. El libro de Alonso y Domínguez, Vidas rotas, pide así a gritos el complemento de un seguimiento de las respuestas del nacionalismo democrático a la secuencia de atentados. De nuevo emerge el fondo ideológico común. El mundo nacionalista celebra lógicamente el fin de ETA, niega su derecho a presentarse como agente de la liberación nacional vasca, pero no está dispuesto a fundirse con quienes intentan revisar en profundidad lo ocurrido.

Les satisface la falacia de que es el pueblo vasco, amante de la paz, quien ha derrotado a ETA. Es éste también uno de los leitmotiv en el discurso del lehendakari Patxi López, explicable por razones electorales. Solo que un votante de Amaiur puede reivindicarlo, añadiendo que ETA es quien hoy busca la paz al “resolver” el tema de los presos frente al gobierno del PP. Algo que además sostiene el presidente del PSE, Eguiguren, con el respaldo casi cotidiano de sus palomas mensajeras, para así aproximar al socialismo vasco a un mundo abertzale hegemónico. Sin que desde el área de Patxi López se dé replica alguna. Es un fenómeno insólito en la historia de los partidos vascos. Eguiguren actúa como solista, contrario siempre al camino común antiterrorista; mientras cada vez de forma más acentuada, el PSE, promueve tomas de posición favorables hacia los llamados “mediadores” internacionales y a Bildu/Amaiur, sobre la exigencia de otorgar a toda costa medidas favorables a los presos frente a la rigidez del PP.

De este modo, las dos partes del discurso de Patxi López no encajan. Su intervención inaugural en el reciente congreso sobre Memoria y Convivencia define con toda claridad lo que ha supuesto la acción terrorista de ETA para los dos primeros círculos de sus víctimas, las cuales, por añadidura quedaron encerradas en “un mundo aparte” dentro de la sociedad vasca. El reconocimiento por todos de esta realidad es capital para un futuro democrático. Sin embargo, a continuación, la premisa de que es necesario abrir la puerta en la sociedad vasca a quienes practicaron el terrorismo de ETA, olvida en su desarrollo que el relato terrorista permanece intacto tanto en los presos como en la izquierda abertzale. No es que rechacen pedir perdón, es que a diferencia de las Brigate Rosse en su día, tampoo reconocen sus responsabilidades. Y se ven además triunfantes muy pronto. ETA sigue ahí. Sin efectos reales, la memoria democrática se convierte entonces en un sermón vacío.

Antonio Elorza es catedrático de Ciencia Política.

FUENTE: EL PAÍS, 21 MAYO 2012 

1000 AÑOS DE EUROPA




FAST FORWARD DE EUROPA, DESDE EL AÑO MIL: CURIOSO.... CLICA AHÍ.

FUENTE: DIARIO VASCO 16 MAYO 2012

EL ESPEJISMO CENTRALISTA (Javier Pérez Royo)



En los escasos momentos de protagonismo democrático de la sociedad española en los últimos dos siglos siempre se ha acabado optando por un Estado políticamente descentralizado. Ocurrió en la experiencia que se podría calificar de protodemocrática del Sexenio Revolucionario, que se inició con el intento de redefinir la monarquía en términos parlamentarios a través de la Constitución de 1869, para acabar desembocando en la república federal. Volvió a ocurrir en la Segunda República, nuestra única experiencia realmente democrática anterior a la de 1978, que optó por abrir constitucionalmente un proceso de descentralización, al que se incorporó de entrada únicamente Cataluña, pero al que se incorporaron después País Vasco y Galicia y estaban a punto de incorporarse varias otras regiones en el momento en que se inició la Guerra Civil. Sin la guerra, el mapa del llamado por la Constitución de 1931 Estado “integral” hubiera sido a finales de la década de los treinta el mapa del Estado autonómico actual, con ligeras variantes. Ese era el mapa que figuraba en la Ley del Tribunal de Garantías Constitucionales, en el que había un magistrado por cada una de las regiones autónomas. 

Y ha vuelto a ocurrir, tras la muerte del general Franco, en el momento en que, tras los resultados de las elecciones del 15 de junio de 1977, las Cortes Generales, que no habían sido pensadas como Cortes constituyentes, acabaron convirtiéndose en tales. El constituyente de 1978 no definió la estructura del Estado, pero sí descartó que el Estado unitario y centralista pudiera ser la forma de Estado de la democracia española. El reconocimiento del derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones que integran España forma parte del núcleo esencial de la definición constitucional del Estado.

En nuestra historia política y constitucional hay coincidencia entre democracia y descentralización política. No hay alternativa democrática a la descentralización política. Ha habido una alternativa constitucional de muy baja calidad, con fuerte tendencia hacia el autoritarismo y sin capacidad de transformarse en un sentido democrático, como ocurrió con la alternativa de la Restauración, con la Constitución de 1876, que no por casualidad acabó en la dictadura de Primo de Rivera. Y ha habido una alternativa directamente anticonstitucional como la del régimen del general Franco tras la Guerra Civil. Una vez entrada en vigor la Constitución de 1978, era la alternativa que se dibujaba tras el intento de golpe de Estado del 23-F de 1981.

No hay alternativa democrática al Estado autonómico. Pensar en una dirección política democrática de la sociedad española prescindiendo del ejercicio del derecho a la autonomía es un espejismo. Claro que se pueden hacer reformas. El propio Estado autonómico ha sido el resultado de sucesivas reformas que se han ido produciendo desde finales de 1979. El Estado autonómico, como suele ocurrir con todos los Estado políticamente descentralizados, no ha sido nunca igual a sí mismo, sino que está evolucionando permanentemente. Esa evolución exige o no cambios estructurales, según la intensidad de la misma. Pero no se detiene nunca.

Ahora bien, conviene ser claros. Cabe la reforma del Estado autonómico, pero no su desnaturalización. El ejercicio del derecho a la autonomía por las nacionalidades y regiones es una condición sine qua non para la unidad política de España. En este momento, encontrándonos en la Unión Europea y tras lo que ha ocurrido en el continente europeo tras la caída del Muro de Berlín, ya no caben soluciones dictatoriales frente a la descentralización política, como ocurrió en el pasado. De ahí que la alternativa posible al Estado autonómico no sea un centralismo autoritario, sino la ruptura de la unidad política del Estado. No la creo probable, pero no creo que estemos avanzando en la dirección adecuada para que la podamos considerar completamente descartada.

Esta es la encrucijada en la que podemos encontrarnos en un futuro no muy lejano. Estoy persuadido de que la mayoría de la población, aunque no repartida de manera uniforme en todo el territorio del Estado, preferiría no tener que encontrarse en esa encrucijada. Pero a veces se actúa de manera que se acaba perdiendo el control del proceso que se pone en marcha con los propios actos. En la historia hay muchos ejemplos. Y el descrédito al que está siendo sometido el ejercicio del derecho a la autonomía puede acabar siendo uno de ellos. El problema territorial es el más complicado de resolver, con diferencia. En España hemos encontrado un compromiso razonable, que puede ser reformado, pero no sustituido. Hay demasiada gente jugando a aprendices de brujo.

FUENTE: EL PAÍS, 12 MAYO 2012

MI PRIMER "CARA A CARA" CON EL "GUERNICA"

Pablo Picasso pintando el ‘Guernica’, fotografiado por Dora Maar en 1937.

Hace 75 años Pablo Picasso dio la primera pincelada sobre el gran lienzo que habría de convertirse en una de las obras más importantes, emblemáticas, polémicas y arrolladoras del siglo XX. El Guernica no sólo se aprecia por su tamaño (3,50 x 7,80 metros), ni por el hecho de que se convirtiera en el símbolo del republicanismo, ni por sus viajes y leyendas, ni por el terror que el pincel del artista fue capaz de plasmar en solo un mes de trabajo, ni por el color que el cuadro desprende utilizando la ausencia del color. Un proceso de gestación que Baltasar Magro ha novelado en La luz del Guernica (Roca Editorial). Pero la obra de Picasso es una sensación, una experiencia interior que provoca en cada persona que se acerca a contemplarlo y se deja atrapar por la inmensidad del blanco y negro del maestro de las formas del siglo pasado. Como suele ocurrir con las obras irrepetibles, la primera impresión nunca se olvida y así lo cuentan algunos de los intelectuales, escritores, cocineros y artistas más relevantes que relatan cómo, dónde y cuándo fue su primer cara a cara con el Guernica.

“La primera, la segunda, y aunque lo veas mil veces el Guernicaproduce una impresión muy potente”, reconoce el pintor Antonio Lópezque lo contempló por primera vez en 1981 cuando llegó a Madrid, en el Casón del Buen Retiro, dentro de una vitrina y custodiado por guardias civiles. La misma sensación tuvo la comisaria y exdirectora del Museo Picasso de Málaga, Carmen Giménez, para quien, como hija de republicanos, el cuadro fue su bandera durante su infancia: “Cuando lo vi por primera vez en el MoMA de Nueva York me impresionó muchísimo. Tendría unos 18 años. La composición y el equilibrio lo hacen inmune al paso del tiempo, me sigue dando escalofríos. Queda para siempre”.

çCuando lo trajeron al Casón, uno no se podía acercar. “Como si llevasen algo peligroso, radiactivo”, explica el pintor Luis Gordillo.“Ahora que lo he podido observar sin miedo y sin tapujos puedo decir que es una obra pictórica en grado sumo, con ese argumento ético que es protagonista de la época, que Picasso supo traducir al cien por cien”. La presencia policial es lo que más llamó la atención de la artistaCarmen Calvo. Tal vez porque ya lo había contemplado en el museo neoyorquino.

El Guernica es, sin duda, una obra para divagar, para tener sobre él una conversación infinita. Filosofar. En palabras de Fernando Savater“está tan sobrecargado de historia, de leyenda, de metafísica y de arte que se convierte en experiencia. Es la vivencia histórica, una estampa que todos tenemos interiorizada en la cabeza más que en el museo”.

Una experiencia personal que incide de mil maneras distintas en cada individuo. El poeta sirio Adonis asegura: “Cuando me encontré frente a él por primera vez en París sentí horror, un horror bello provocado por la fuente de expresividad que creó Picasso en ese lienzo inmenso”. El cocinero Ferrán Adriá reconoce no haber vivido nunca una experiencia tan emotiva: “Pocas veces me ha pasado con una obra de arte: me trasladó a Guernica. Es de las pocas que cuentan historia y consigue meterte en ella, lo que la hace el doble de potente. Tiene ese mimetismo de realidad y arte genial, un componente emotivo y social bestial, a base de arte y de belleza drástica”.

La primera vez de la escritora brasileña Nélida Piñón fue en Nueva York en el año 1966 y, como para casi todos, fue una experiencia extraordinaria que no ha podido borrar: “Fue un shock. Me pareció una visión mítica y después todo se deshizo en sangre y terror dentro del marco de una creación poderosa que acompaña un golpe de conciencia de humanidad. Sentí miedo y deslumbramiento. Recuerdo que salí asombrada y me compré un hot dog en un puesto de alguna avenida neoyorquina”, relata soltando una carcajada.

El mexicano Carlos Fuentes, uno de los más relevantes escritores en español, recuerda que descubrió la magia del Guernica muy joven y con ella el significado sociopolítico que estaba escrito en cada pincelada que dibujó el artista. “El cuadro fue el gran grito de atención, de alarma de la II Guerra Mundial, que las democracias dejamos pasar como si no sucediera nada. Y tuvieron que pagarlo con un alto precio”, explica Fuentes refiriéndose al bombardeo de la ciudad vasca que inspiró a Picasso mientras cumplía con el encargo de Josep Renau.

Los gritos dibujados han dejado escucharse por la historia, y han encontrado la fórmula de no dejar a nadie indiferente. El productor de cine, Jaime Rosales, se deja seducir por la imperfección de la obra: “Es lo que más me maravilla del cuadro, que es humano y no es exacto. Es potente, muy potente, pero humano. ¡Una conquista extraordinaria!”.

A la fotógrafa y pintora Ouka Leele le despierta la creatividad: “Cuando lo vi en el Casón de Madrid me imaginé a Picasso pintando, y me urgía ir a pintar. El dolor de las madres, la muerte, el auténtico terror... y la luz. Me encanta que sea blanco y negro. Tuve la primera impresión de que Picasso había utilizado el lenguaje del cómic”. El blanco y negro también llamó la atención del fotógrafo Alberto García-Alix: “La ausencia del color... Y el tamaño, no me imaginaba que fuera tan grande”. El director del Museu Picasso de Barcelona, Bernardo Laniado-Romero, recuerda “como si fuese ayer” cuando se topó con el cuadro en el MoMA: “Una sensación de sobrecogimiento total ante aquel testimonio vivo de los horrores de la guerra”.
Hasta aquí los recuerdos. Hoy, el Guernica está en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, de Madrid. Su director, Manuel Borja-Villel, repasa el cambio social que ha vivido España junto al cuadro. “Del cristal antibalas y los guardias civiles custodiándolo a mostrarse en el contexto que le corresponde, compartiendo espacio con sus contemporáneos Calder, Reanud, Julio González y Miró, es no solo un elemento que tiene que ver con la contextualización histórica y artística de una obra, sino también con el contexto político de un país”. La de una obra que empezó a pintarse hace justamente 75 años.

FUENTE: EL PAÍS (Rocío HUERTA), 9 MAYO 2012

* MÁS ENLACES INTERESANTES SOBRE EL "GUERNICA"
‘Los desastres de la guerra’, de Rubens inspiró, el ‘Guernica’ de Picasso

SNIF, SNIF





Amo a Laura, pero ella no me corresponde.


Por eso, disfrutad de los tres vídeos que hay a continuación. 


Mucho más interesantes y más sabios que todos los cuentos que os he contado este curso (véase otro video más abajo sobre los cuentos).


Niñas y niños: ha sido muy bonito mientras duró.


Ahora, sueñen y vuelen.


BUENA SUERTE. AIO. MXK


JRS



QUIERO QUE ENCUENTRES TU PROPIO CAMINO, TU PROPIO MODO DE CAMINAR

HACED QUE VUESTRA VIDA SEA EXTRAORDINARIA

TÚ PUEDES CONTRIBUIR CON UN VERSO ¿CUÁL SERÁ TU VERSO?

UN ENSAYO EXCULPA A AZAÑA DE LA MATANZA DE CASAS VIEJAS


Fue el proceso más famoso de toda la Segunda República, un juicio en el que se delimitaron las responsabilidades en uno de los mayores ejemplos de represión institucional de todo aquel turbulento periodo. 20 personas murieron en el pueblo gaditano de Casas Viejas durante una insurrección de anarquistas en enero de 1933. Entre las víctimas 14 anarquistas de la localidad, que fueron ajusticiados por unas tropas mandadas por el capitán Manuel Rojas; dos guardias civiles y un guardia de asalto. El caso Casas Viejas provocó ríos de tinta en los periódicos, fue motivo de acalorados debates parlamentarios y se mantuvo en la memoria popular durante décadas como sinónimo de los pretendidos desmanes de la República y del carácter de "monstruo" de su principal dirigente, Manuel Azaña.

Un periodista del Diario de Cádiz,Tano Ramos, ha dedicado cinco años de investigación a despejar las numerosas incógnitas y, sobre todo, a descubrir las grandes mentiras que se escondieron en los dos juicios sobre el caso, celebrados en la audiencia gaditana en 1934 y en 1935. "Existían muchas lagunas historiográficas, a pesar de la trascendencia política y judicial de Casas Viejas", comenta este periodista especializado en tribunales que se reconoce tímido y sorprendido por haber recibido uno de los premios de ensayo más prestigiosos de España, el Comillas de Historia, Biografía y Memorias que organiza la editorial Tusquets. "Entre las lagunas la más fundamental se refería a que el sumario del caso había desaparecido y solo pude conseguir una copia a través de la hija de Andrés López Gálvez, uno de los abogados de la acusación particular".

A lo largo de la elaboración del libro El caso Casas Viejas. Crónica de una insidia Ramos descubrió que "era absolutamente falsa esa leyenda de que Azaña no había comparecido como testigo". "También pude averiguar que algunos de los defensores del capitán Rojas participaron en un complot para asesinar a Azaña, que había sido primer ministro y ministro de la Guerra en el periodo 1931 y 1933 y que en el momento de los juicios militaba en la oposición. Asimismo, he podido desmontar aquella teoría de que Azaña había ordenado que se sofocara la rebelión anarquista de Casas Viejas con tiros en la barriga a los sublevados. Las órdenes las dio el capitán Rojas, que fue finalmente condenado".

Crónica de crónicas
Define el autor su libro como una crónica de crónicas, ya que ha reconstruido los juicios a partir de las informaciones periodísticas sobre el caso que ocuparon a todos los medios de comunicación, tanto locales como nacionales, dentro de un clima de gran expectación. Llegaron afamados reporteros de Madrid e incluso novelistas de éxito como Ramón J. Sender quisieron también aportar sus relatos o, mejor habría que decir, sus interpretaciones, muy alejadas de la realidad, en opinión de Ramos. "El caso Casas Viejas", explica, "es la historia de una inmensa manipulación periodística, de mentiras mil veces repetidas que terminan por convertirse en verdades con el paso del tiempo. En esa operación que pretendía linchar moralmente a Azaña y desprestigiar a la República coincidieron tanto la extrema derecha como los anarquistas en una curiosa pinza".

Los medios derechistas, con Abc a la cabeza, mintieron de forma descarada
Cuenta Ramos que "mientras órganos ligados a la CNT, como La Tierra,pecaron de cerrazón ideológica y de confusión de la información con la propaganda, los medios derechistas, con el monárquico Abc a la cabeza, sabían lo que estaba pasando y mintieron de forma descarada por intereses políticos". "En medio, la prensa republicana moderada se vio impotente y desbordada para arrojar luz sobre aquella matanza".
¿Cuál fue el error de Azaña? "El error de Azaña", responde Ramos sin dudar, "fue no acabar de creerse la crueldad de la masacre de Casas Viejas". "Una vez sale de su incredulidad envía a un militar y a un magistrado para que preparan sendos informes y aclaren lo sucedido. Azaña nunca entorpeció, sino todo lo contrario, la investigación".

Es consciente el autor premiado de que su libro representa una obra de historia escrita por un periodista y de que los historiadores profesionales suelen pensar más en sus colegas a la hora de escribir que en los lectores. El esfuerzo ha merecido la pena y Ramos se embarcará en otros proyectos literarios similares. "De todos modos me alegra recibir felicitaciones de gente interesada en el periodo republicano que me confiesa que, por primera vez, se ha investigado a fondo un caso que pervivió incluso durante la dictadura, alentado por el odio de los franquistas y de los anarquistas a Azaña".

FUENTE: EL PAÍS (Miguel Ángel Villena) 5 MAYO 2012

AMÉRICA Y LA CONSTITUCIÓN DE 1812 (Manuel Chust)


En una época marcada por la pólvora y el pedernal, la bayoneta y el sable, los asedios y las carencias alimentarias, emergió el Poder de la Palabra. Tribuna y oratoria, pluma y periódicos, discursos y decretos irrumpieron en el fragor de la contienda. La guerra se volvió también revolución. Primero en la Isla de León y después en Cádiz. Las Cortes que se reunieron a partir del 24 de septiembre de 1810 fueron muy diferentes a las conocidas hasta entonces. No solo porque dejaron de reunirse por mandato real y por el sistema de estamentos, sino porque, entre otras consideraciones, se emitió una convocatoria electoral a “todos los territorios de la Monarquía española”.

De esta forma, el parlamentarismo español nacía con diputados no solo peninsulares, sino también americanos y filipinos. Ello motivó que se celebraran elecciones además de en la España no ocupada por los franceses, en los “otros” territorios de la Monarquía, es decir, en Nueva España, en la capitanía general de Guatemala —Centroamérica—, en Perú, en Cuba, en Puerto Rico, en Filipinas, en la Banda Oriental —hoy Uruguay— y en partes de Venezuela, Nueva Granada —las actuales Colombia y Ecuador— y la audiencia de Charcas —actual Bolivia—. De esta forma llegaron representantes americanos a las Cortes. No estaban “desconectados” de la realidad. Traían con ellos las Instrucciones que sus cabildos habían elaborado para que las expusieran en las Cortes. Estas eran, en muchos casos, no solo cahiers de doleances sino auténticos programas de medidas y reformas autonomistas, tanto económicas como políticas, liberales. Sus nombres quedan para la historia: José Mejía Lequerica, Ramón Power, Dionisio Inca Yupanqui, José Miguel Ramos de Arizpe, Miguel Guridi y Alcocer, Antonio Morales Duárez, Antonio Larrazábal, entre otros muchos.

SIGUE LEYENDO ESTE INTERESANTE ARTÍCULO EN ESTE ENLACE DE EL PAÍS.

Manuel Chust es atdrático de Historia Contemporánea de la Universidad Jaume I de Castellón.

FUENTE: EL PAÍS, 21 abril 2012

TEBA (MÁLAGA) REABRE LA SEGUNDA MAYOR FOSA COMÚN DE LA GUERRA CIVIL

Restos humanos en la fosa de Teba (Málaga). / JORGE ZAPATA (EFE)

El cementerio de Santo Toribio de Teba  (Málaga, 4.300 habitantes) a los pies del imponente castillo de la Estrella, del siglo X, es un reflejo funerario de las dos Españas. En el centro del recinto, tras pasar el arco de medio punto de la entrada, destaca un conjunto formado por una docena de tumbas. Las lápidas, de mármol blanco, son de agosto y septiembre de 1936. En ellas se puede leer el nombre del difunto y la siguiente inscripción: “Vilmente asesinado por los enemigos de Dios”. Otras sepulturas hacen referencia a los “sin Dios” o a las “hordas marxistas”.

Veinte metros al sur del ordenado panteón de las víctimas pertenecientes al bando nacional, un grupo de arqueólogos trabaja en la que se considera la segunda mayor fosa común de simpatizantes republicanos de la Guerra Civil y del franquismo. A ella fueron arrojados 125 vecinos de Teba entre octubre de 1936, cuando las tropas de Franco entraron en el pueblo, y 1949, último año registrado en el archivo municipal. Ya se han recuperado 35 cuerpos.

La fosa mide unos 25 metros de largo por dos de ancho. Con la ayuda de una navaja y de una pequeña brocha, los arqueólogos delimitan con paciencia los cadáveres. El mimo que ponen en su trabajo contrasta con la brutalidad con la que los fusilados fueron enterrados, unos encima de otros sin orden ni concierto. “En otras fosas, como en el cementerio de San Rafael de Málaga [la mayor fosa común abierta hasta ahora, con 4.300 cadáveres] los cuerpos estaban alineados. Aquí están apiñados sin control ni miramientos. No sé si por las prisas o por el propio odio de quienes los mataron”, describe Cristóbal Alcántara, uno de los arqueólogos que participa en la exhumación, emprendida por la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Antequera y Comarca con una subvención de 60.000 euros.

Los asesinos no se molestaron en registrar a sus víctimas, y entre los restos humanos se han hallado numerosos objetos personales, como mecheros, monedas o medallas de la Virgen del Carmen, patrona de la localidad.

Al igual que sucedió durante la llamada Reconquista en la Edad Media, Teba, a unos 60 kilómetros al norte de Málaga capital, estaba atravesada por una de las líneas del frente sur de la Guerra Civil. El 23 de febrero de 1937, cuando el frente ya se había roto y las tropas de Queipo de Llano ya habían entrado a sangre y fuego en la capital, sucedió lo que en el pueblo se conoce como “la noche de los ochenta”.

Esa noche, los falangistas vaciaron las dos cárceles improvisadas en las que habían ido encerrando a los vecinos —ferroviarios, maestros, peones camineros— que regresaron al pueblo confiados en las proclamas que prometían perdón a quienes no tuvieran delitos de sangre. En grupos de diez, los fusilaron en las tapias del cementerio y los tiraron a la fosa. Entre los 83 asesinados esa noche había tres mujeres. “Una de ellas, de 22 años estaba embarazada de siete meses. Su delito fue sacar la bandera republicana el 1 de mayo”, cuenta José Camarena, un vecino de Teba que trabaja en la excavación.

FUENTE: EL PAÍS (Fernando J. Pérez) 3 MAYO 2012

ARANZADI OFRECE UN BUSCADOR DE MEGALITOS EN GIPUZKOA


Dolmen de Aizkorri
La Sociedad de Ciencias Aranzadi ha realizado un buscador cartográfico de los monumentos megalíticos de Gipuzkoa, con información de más de 250 yacimientos, desde los más antiguos del Calcolítico hasta los del Neolítico.

Este buscador pretende ser una herramienta útil para todos aquellos interesados en el patrimonio cultural. Además, aporta información muy completa y detallada de cada monumento, como, por ejemplo, descripción del megalito y de las investigaciones desarrolladas en él, bibliografía actualizada, así como fotografías y planos de la estructura. También se ofrece un documento en formato pdf con la información publicada en la Carta Arqueológica de Gipuzkoa, trabajo realizado en colaboración con la Diputación Foral de Gipuzkoa.

El buscador se ha implementado en la página web de la sociedad y su dirección es:
http://www.aranzadi-zientziak.org/carta-megalítica

Existe también versión en euskera, en esta dirección:
http://www.aranzadi-zientziak.org/carta-megalítica?lang=eu

En el caso de conocer el nombre del megalito, se puede llegar directamente a la información sobre el yacimiento. Se pueden hacer otras búsquedas más generalistas jugando con los cuatro apartados: Estación megalítica, Tipo de yacimiento / Inmueble, Secuencia cultural y Comarca/Municipio.

Por ejemplo, si se hace la búsqueda de dólmenes (en el apartado Tipo de yacimiento) y Sierra de Aizkorri (en el apartado Estación megalítica'), aparecen datos sobre seis dólmenes: Aizkorritxo, Artzanburu, Gorostiaran Oeste, Kalparmuñobarrena, Pagarreta y Pagobakoitza.

Por poner otro ejemplo, buscando Edad del Bronce y Comarca Bidasoa Beherea aparece un cromlech de Jaizkibel

FUENTE: DIARIO VASCO 3 MAYO 2012