CONSTITUCIÓN DE CÁDIZ: VIVA LA PEPA, PERO SIN FUTURISMOS

Óleo anónimo que recrea la Plaza de San Antonio en Cádiz el día de la promulgación de la Constitución en 1812. / GTRES

Solo los mitos son de una pieza y carecen de la prosaica complejidad de la vida real. Y complejidad fue una de las palabras más repetidas ayer en la Residencia de Estudiantes de Madrid para hablar de la Constitución de 1812 como “fundamento de la edad de oro liberal”. La expresión fue acuñada por Juan Marichal para referirse a las tres primeras décadas del siglo XX y en su homenaje se habló largo y tendido de la famosa Pepa en el segundo centenario de su promulgación.

Alicia Gómez-Navarro, directora de la Residencia, citó al propio Marichal para recordar que de aquellas cortes reunidas en el Cádiz sitiado por las tropas francesas salió renovada una palabra “de estirpe cervantina” que terminaría haciendo fortuna en el vocabulario político moderno: liberal. Así, liberales, llamaban los gaditanos a los diputados reformistas reunidos en el Oratorio de San Felipe Neri. Pese a que el 30% de los diputados pertenecían al clero y la representación americana era escasa, la Ley Fundamental salida de aquel templo reconoció a los españoles de “los dos hemisferios” al tiempo que establecía la soberanía popular, la división de poderes y la libertad de imprenta. A cambio mantenía la monarquía y consagraba la religión católica –“la única verdadera”- como la oficial del Estado y prohibía la práctica de cualquier otro culto.

Aunque esos dos puntos fueron durante décadas objeto de debate en el bando progresista, “lo que ninguno criticó fue la exclusión de las mujeres del voto”, recordó Florencia Peyrou, historiadora de la Universidad Autónoma de Madrid. Para desatar el nudo de las posibles contradicciones de un texto dos veces centenario, Javier Fernández Sebastián, profesor de la Universidad del País Vasco, propuso volver al contexto en que nació la Constitución gaditana. “Si no, corremos el riesgo de interpretar la época con el prisma equivocado. A principios del siglo XIX el mundo era muy distinto”, dijo. Así, recordó a dos enemigos de la Pepa, el alemán Von Haller y el francés François de Chateaubriand. Si el primero la consideraba una mezcla entre “el Espíritu Santo y el espíritu del siglo”, el autor de Memorias de ultratumbase preguntaba cómo se las habían arreglado “los españoles” para meter “tanta religión en la política y tanta democracia en la monarquía”. Para Fernández Sebastián, en Cádiz coinciden dos universos con valores que no estaban llamados a mezclarse. De ahí que la Constitución no sea ni revolucionaria ni del Antiguo Régimen sino “transicional”, un Jano con sus dos caras: pasado y futuro. “Somos nosotros los que nos escandalizamos por artículos como el 12 [sobre la religión]. No es que los liberales de la época hicieran concesiones a la Iglesia, es que eranasí”.

Viajar al siglo XIX llevó también a comprobar la influencia global de la Constitución gaditana. El propio Fernández Sebastián destacó que, frente a la costumbre internacional de reservar a los españoles las notas a pie de página en las historias del pensamiento, la presencia en todo el mundo de la Ley Fundamental de 1812 es “abrumadora”. Como mito y como antimito, como ideal de los liberales y horror de los absolutistas. 
Fue Manuel Aragón, magistrado del Tribunal Constitucional, el que subrayó que el texto redactado en Cádiz tuvo “más influencia que vigencia” como ley: la Constitución de 1812 fue abolida en 1814 por Fernando VII y luego rescatada de forma guadianesca: durante el trienio liberal (1820-1823) y unos meses entre 1836 y 1837. Aun así, Colombia, Perú, México, Argentina o el “Imperio del Brasil” se inspiraron en la española para redactar sus respectivas constituciones. Sin salir de Europa, en Italia fue todo un hito. “La confesionalidad católica”, apuntó Aragón, “la hizo más accesible”. Sobre todo teniendo en cuenta que el texto francés de 1791 había quedado marcado por el estigma del terror.

Fue además, señaló Javier Fernández Sebastián, “una declaración de independencia de España”. Pero no del invasor francés como podría pensarse sino del propio rey Fernando VII: “Ahí está el artículo 2, que declara que la nación española no es patrimonio de ninguna familia ni persona. Aunque ya sé que a mi colega [José] Álvarez Junco no le convence la idea de independencia”. Sentado entre el público antes de cerrar la jornada hablando de “la Constitución de Cádiz y la identidad española moderna”, Álvarez Junco se unió a un debate que siempre estuvo a la mayor altura para matizar: “Nunca he negado la idea de independencia. Lo que digo es que la noción de Guerra de Independencia surge 10 años después. Antes era guerra contra el intruso o contra el usurpador; lo de independencia fue un eco latinoamericano”.

Llegado su turno, el autor de Mater dolorosa subrayó que la Constitución de 1812 fue “el esfuerzo más generoso” en un momento de confusión política y crueldad guerrera. Eso sí, lo hizo después de desmontar algunos tópicos: no se promulgó el 19 de marzo para conmemorar a san José sino para el cuarto aniversario de la llegada al trono de Fernando VII; no fue fruto de la presión de la burguesía sino del vacío de poder dejado por el monarca; con ella se crea la identidad española moderna —en Cádiz se oye por primera vez el grito de ¡viva España!—, pero los liberales evitan reconocer la inspiración francesa del texto inventando una tradición de lucha por la libertad que se remonta a Numancia, pasa por la Edad Media y termina enfrentándose al ejército francés, el más poderoso de la época: “No se vieron con fuerza para anclar su proyecto en la mera racionalidad”. Adelantada a su época, la Constitución de 1812 duró poco. Hubo que esperar a 1978, dijo Álvarez Junco, para que algunas de sus ideas arraigaran. Hasta el punto de que la historia pueda plantar cara al mito.

Hitos de 1812
La Ley Fundamental salida de las Cortes de Cádiz reconoció por primera vez a los españoles de “los dos hemisferios”.
El texto debatido en el Oratorio de San Felipe Neri establecía que la soberanía residía en la nación.
Entre otros derechos se consagraron la división de poderes y la libertad de imprenta.
La Constitución mantenía la monarquía como sistema de Gobierno.
Se consagraba la religión católica como la oficial del Estado, se prohibía la práctica de cualquier otro culto y se otorgan una serie de fueros privilegiados al clero.
Se establece como objetivo del Gobierno “la felicidad de la nación”, una de las utopías de la Ilustración.

FUENTE: EL PAÍS (Javier Rodríguez Ramos) 20 NOVIEMBRE 2012

UN VÍDEO INÉDITO DE AZAÑA



De pie, con la cabeza alta y sin leer papel alguno, el presidente de la República, Manuel Azaña, se dirige a los políticos y personalidades congregados el 18 de julio de 1938 en el Ayuntamiento de Barcelona. Se cumplían dos años del intento de golpe de Estado que estalló en Guerra Civil. Azaña pronunció ese día su discurso más célebre, el de las tres pes, "paz, piedad y perdón". Fue una intervención de 71 minutos que intentó, de manera estéril, parar la sangría nacional. De aquel acto se conservaban, por separado, el archivo sonoro y unas pocas imágenes, apenas unos segundos, que grabó ese día la BBC para un reportaje sobre Barcelona. Ahora, 74 años después, la Universidad de Alcalá de Henares y la asociación cultural Foro del Henares han ensamblado ambas piezas en un conseguido montaje, inédito, de aquellas históricas palabras.

Jesús Cañete, estudioso de Azaña y coordinador de actos culturales en la Universidad de Alcalá, explica que las imágenes las localizó en la Filmoteca Nacional, en Madrid, mientras preparaba un trabajo sobre la historia de la ciudad complutense. Por otro lado, recuperó el audio, "que estaba remasterizado en el archivo de Radio Nacional". El resultado es un vídeo que se presentó en las jornadas sobre Azaña y Cataluña celebradas a finales de octubre en Alcalá, lugar de nacimiento de Azaña.

Para el historiador Santos Juliá, autor de la biografía Vida y tiempo de Manuel Azaña (editorial Taurus, 2008), este discurso, "el último que pronunció en su vida" el presidente de la República, fallecido en el exilio francés en 1940, abordó "la guerra entre españoles pero con la dimensión internacional que el conflicto había adquirido". Para el historiador, "Azaña pensó desde el principio que, sin la intervención de Francia y Gran Bretaña, la República no podía triunfar. Él no entendía la neutralidad de las democracias mientras Alemania e Italia ayudaban a Franco. Estaba convencido de que la derrota de la República sería el preludio de la derrota de Francia en la guerra europea que se avecinaba".

Mira el vídeo y lee la noticia completa en este enlace de ELPAÍS.

ARMAS DE PIEDRA

Puntas de lanza experimentales sujetas al palo con resina de acacia y tendones. / JAYNE WILKINS

Una piedra tallada en punta para que penetre bien en la pieza a cazar y atada en el extremo de un palo es un arma más eficaz que una simple vara de madera afilada. Construir una lanza así, con mayor poder de impacto y control, es un salto tecnológico muy notable. ¿Quién lo dio? ¿Cuándo? Unas puntas de piedra que se encontraron hace unos años en Sudáfrica, datadas en medio millón de años y analizadas ahora con un nuevo enfoque son, hasta el momento, el vestigio más antiguo que se conoce de esta técnica de armas de la edad de piedra. Sitúan esta tecnología 200.000 años antes de lo que los vestigios indicaban hasta ahora. Y una vez más, las cronologías de las huellas del pasado ponen patas arriba las ideas acerca de las capacidades de las especies humanas remotas: con 500.000 años, la lanza de punta de piedra sujeta a un palo sería una tecnología no del hombre contemporáneo ni de los neandertales, como se pensaba hasta ahora, sino del antepasado común de ambos, el Homo heidelbergensis.

“Esto cambia la manera en que pensamos acerca de las adaptaciones y capacidades de los humanos primitivos antes del origen de nuestra propia especie”, dice Jayne Wilkins, líder del equipo que ha hecho el descubrimiento. Fabricar armas de caza atando una punta a una lanza de madera requiere esfuerzo y planificación, pero aumenta su potencial de matar.

Estos científicos que han identificado las marcas en la base de las puntas de piedra de hace medio millón de años han realizado toda una labor detectivesca para demostrar su utilización como lanzas y publicar el hallazgo en la revista Science.

El hallazgo cambia la idea sobre las adaptaciones del hombre primitivo
Las piezas fueron halladas por Peter Beaumont, en 1979, en el yacimiento de Kathu Pan 1, en Sudáfrica y 20 años después, en 2010, fueron datadas por Michael Chazan y su equipo en 500.000 años. El siguiente paso lo dan Jayne Wilkins y sus colegas de las universidades de Toronto (Canadá), Arizona (EE UU) y Ciudad del Cabo (Sudáfrica), incluido el propio Chazan, al identificar marcas y desperfectos en la base de esas piezas de industria lítica que encajan con la técnica de sujetarlas al extremo de un palo, convirtiéndolas en eficaces lanzas.

Para demostrar esta hipótesis, los investigadores incluso fabricaron 32 réplicas de las puntas —talladas en la misma piedra—, las ataron en el extremo de palos de madera e imitaron el uso que pudieron hacer de ellas los hombres prehistóricos lanzándolas contra carcasas de pequeños antílopes. “Cuando las puntas se utilizan como extremos de lanza, se producen muchos desperfectos en ellas y fracturas específicas”, dice Kyle Brown, uno de los científicos del equipo. “Los daños en esas antiguas puntas de lanzas son muy similares a los producidos en las réplicas de nuestro experimento y, además, demostramos que no se hacen fácilmente en otras condiciones”, añade.

Los homínidos cazaban grandes animales hace ya, al menos, 780.000 años, recuerdan Wilkins y sus colegas, a la vista de los vestigios en restos de carcasas de venado encontradas en Israel.
De hace 500.000 años es un hueso de caballo con una perforación que debió hacer una lanza y que se encontró en Boxgrove (Reino Unido). En cuanto a armas, fue descollante el hallazgo de unas jabalinas de madera —palos de abeto con las dos puntas afiladas, de hasta 2,30 de longitud— y perfectamente preservadas en agua que descubrió, en los años noventa, el arqueólogo Harmut Thieme en una mina de carbón en Alemania. Los humanos las utilizarían seguramente para cazar caballos, dado que se encontraron junto con muchos huesos de ese animal.

Los científicos han reproducido la caza de antílopes con réplicas de las tallas
Las lanzas compuestas, es decir, con una punta atada a un palo, parece que eran algo corriente en Europa y en África hace unos 200.000 años, e incluso se conocen indicios de 300.000 años en el continente africano. Podrían haberlas inventado los neandertales y los humanos modernos (ambos las utilizaban) o unos lo habrían copiado de los otros. Pero si se sabía construir estas armas mucho antes, hace medio millón de años, la especie innovadora sería muy anterior: el ancestro común a partir del cual evolucionarían los neandertales y la humanidad moderna. “Esta es la primera prueba de que esta tecnología se originó antes o muy cerca de la divergencia de esas dos especies”, dice otro miembro del equipo, Benjamin Schoville, de la Universidad de Arizona.

“Al parecer, se puede seguir el rastro de algunos de los rasgos que asociamos con los humanos modernos y con nuestros parientes más cercanos mucho más atrás en nuestro linaje”, comenta Wilkins. “Esto cambia la manera en que vemos las adaptaciones y capacidades de los humanos primitivos antes del origen de nuestra propia especie”, concluye.

Navegar por el Mediterráneo
Para llegar a las islas hacen falta unas capacidades de navegación nada despreciables, y se sabe que los humanos, por ejemplo, cruzaron el mar hasta Australia hace 50.000 años. Incluso los homínidos (Homo erectus) pudieron alcanzar la isla de Flores (Indonesia) hace algo más de un millón de años surcando un considerable tramo de agua. En el Mediterráneo, ¿cuándo se empezó a navegar?

La presencia humana en las islas de Creta y Chipre se había situado en torno a los 9.000 años. Pero últimamente se han acumulado pruebas que adelantan la colonización de Chipre hasta hace 12.000 años, explica Alan Simmons (Universidad de Nevada) en Science. Sin embargo, la ocupación de Creta puede ser tan antigua como 170.000 años, a la vista de las hachas de cuarzo y otras herramientas de piedra descubiertas allí. Esto significa que los remotos navegantes del Mediterráneo pudieron ser tempranos Homo sapiens o neandertales.

FUENTE: EL PAIS (Alicia Rivera) 20 NOVIEMBRE 2012

MUERTE DE CANALEJAS: EL MAGNICIDIO QUE ACABÓ CON LA RESTAURACIÓN

Canalejas yace muerto tras ser tiroteado en la madrileña Puerta del Sol./ RC
Antonio Cánovas del Castillo, Eduardo Dato y José Canalejas. Estos tres presidentes del Gobierno de España comparten una misma tragedia: fueron asesinados durante su mandato por radicales anarquistas. Pero fue la muerte de Canalejas hace ahora cien años la que tuvo una repercusión mayor al precipitar la desintegración de la política vigente en el país desde la Restauración.

Desde el finales del siglo XIX la situación política española se deterioró considerablemente. El sistema de turno de partidos entre conservadores y liberales ideado por Cánovas entró en crisis. La situación se agravó con la guerra y posterior pérdida de las posesiones de ultramar de Cuba y Puerto Rico. Para tratar de remediar el golpe moral que supuso abandonar esas colonias los dirigentes políticos se enfrascaron en una guerra en Marruecos con el objetivo de recuperar el prestigio. El conflicto se desarrolló con distinta intensidad durante el primer cuarto del siglo XX y supuso un punto más de distanciamiento entre la clase política y la sociedad. Mientras, la presión de un cada vez mejor organizado movimiento obrero era mayor en las calles.

En este contexto José Canalejas desarrolló su vida política. Este coruñés nacido en 1854 demostró desde su infancia una gran inteligencia y capacidad para los idiomas. De ideología liberal -se acercó al Partido Demócrata Progresista de ideas republicanas- finalmente se afilió al Partido Liberal liderado por Mateo Sagasta. En 1881 fue elegido diputado por primera vez. Una responsabilidad que renovaría en sucesivas elecciones. Su valía le llevó a formar parte de distintos Gobiernos en los que ocupó las carteras de Justicia, Fomento, Hacienda o Agricultura.

En aquellos años los Ejecutivos se sucedían a una velocidad de vértigo, poniendo de manifiesto la crisis política existente. Canalejas trató de mantener la unidad de las distintas corrientes del liberalismo tras la muerte de Sagasta en 1903. Esta actitud era fundamental, ya que el Partido Liberal era una de las patas sobre las que se asentaba el sistema. El éxito en dicha tarea se transformó en su llegada a la presidencia del Gobierno en 1910.

Desde el poder trató de profundizar en su idea de separación entre Iglesia y Estado con la limitación de nuevas órdenes religiosas. Sin embargo, prosiguió con la guerra en Marruecos, un conflicto estéril y sin apoyo popular. Canalejas tuvo que hace frente incluso a un intento de sublevación militar a favor de la república.

En la mañana del 12 de noviembre de 1912 Canalejas fue tiroteado mientras observaba un escaparate de la librería San Martín en la madrileña Puerta del Sol. Su asesino, el anarquista Manuel Pardiñas, se suicidó antes de ser detenido. El magnicidio causó un gran impacto en la sociedad e incluso fue recreado en una película de la época titulada 'Asesinato y entierro de don José Canalejas' en el que el actor José Isbert interpretó al asesino. La cinta recoge el multitudinario entierro del presidente en una muestra de la enorme repercusión que tuvo en las calles de la capital. La muerte de Canalejas supuso el fin del sistema surgido de la Restauración, aunque todavía perduraría una década más, hasta el golpe de Estado del general Miguel Primo de Rivera.

Mira en este enlace un VIDEO sobre el tema.

FUENTE: DIARIO VASCO 19 NOVIEMBRE 2012

LANZAS CON PUNTAS DE PIEDRA DE HACE MEDIO MILLÓN DE AÑOS

Puntas de lanza de procedentes del yacimiento de Kathu Pan 1 (Sudáfrica) y datadas en 500.000 años. / JAYNE WILKINS

Los humanos prehistóricos hacían lanzas con puntas de piedra tallada hace medio millón de años, según rastros hallados en Sudáfrica. Se sabía ya que esta tecnología de atar la punta a un palo, mucho más eficaz para la caza que la simple vara de madera afilada, era corriente hace entre 200.000 y 300.000 años y la utilziaban tanto los neandertales como los Homo sapiens. Las puntas ahora estudiadas casi duplican la antigüedad de esta técnica y sugiere que la dominaba ya el ancestro común de ambas especies, según indica la revista Science, donde Jayne Wilkins (Universidad de Toronto, Canadá) y sus colegas presentan su investigación.

“Todo parece indicar ahora que algunas características que asociamos a los humanos modernos o a nuestros más cercanos parientes [los neandertales] pueden remontarse mucho más atrás en nuestro linaje”, señala Wilkins. “Esto cambia la forma en que nos planteamos las adaptaciones y capacidades de la humanidad primitiva antes del origen de nuestra propia especie.

Las puntas de lanzas talladas y con marcas que, según los científicos, se asocian a las ataduras a un mango o un palo de madera fueron halladas entre 1979 y 1982 en el yacimiento sudafricano de Kathu Pan 1 por Peter Beaumont (Museo McGregor). Hace un par de años Michael Chazan, uno de los autores de la investigación que ahora se presenta, dataron en 500.000 años el nivel del yacimiento donde habían aparecido las puntas que ahora han estudiado a fondo, incluyendo su eficacia en la caza.

La tecnología de sujetar una punta de piedra a un palo fue un avance muy importante en la tecnología de caza, señalan los investigadores, pero también requieren mayor habilidad y planificación para hacerlas.

FUENTE: EL PAÍS 15 NOVIEMBRE 2012