EN LA CORTE DE ALFONSO X (1221-1284)


 Juan Diego grita a pleno pulmón. «¡Postraos ante vuestra majestad!». y la sala se gira, muda ante el torrente de voz del actor sevillano. Barba cuidada, otro tanto con la melena y regias vestimentas del siglo XIII. Se ha convertido en Alfonso X para 'Toledo', la nueva serie de época que rueda Antena 3 y que estrenará a comienzos de 2012.

La cadena tuvo que convencer a Juan Diego para que volviera a la televisión, porque tenía sus reticencias. «Hay que dosificar estas participaciones», advierte el actor, que acabó de convencerse cuando le explicaron que iba a interpretar al impulsor de la Escuela de Traductores de Toledo y que el proyecto nacía al amparo de la buena salud de las ficciones de época. «Alfonso X hizo un gran intento por fomentar la convivencia de las tres culturas y el conocimiento», explica 'su majestad'. Porque la capital manchega reflejaba la frágil paz que existía entre los seguidores de las grandes religiones monoteístas. «Se podía propagar cualquier rumor que ponía en peligro la paz». Pero el personaje tiene más aristas. «Tampoco hay que olvidar que fue un guerrero y que tuvo mujeres por todas partes», explica el actor entre risas.

'Toledo' arranca cuando Alfonso X, después de fijar las fronteras cristianas, firma la paz con los musulmanes dirigidos por Abu Bark (Daniel Holguín). Su objetivo es que los cristianos, los seguidores de Mahoma y los sefardíes de la ciudad -representados por Abraham (Álex Angulo)- puedan vivir en paz. Con el rey vuelve su fiel vasallo Rodrigo (Eduard Farelo), que se ha pasado toda la vida batallando. Tendrá que cambiar de rol y aprender a perdonar, ya que Abu Bark mató a su mujer y a su primogénito. Con él regresan sus otros dos hijos, Martín y Blanca, interpretados por Maxi Iglesias y Bea Vallba.

Don Rodrigo, desde su puesto de magistrado real, deberá mantener el equilibrio de poderes entre las tres comunidades y evitar al conde de Miranda (interpretado por Fernando Cayo), que ocupaba su puesto antes de que se lo arrebatara el rey.

«Ahora el vasallo soy yo»

«Miranda es fantástico. Es el antagonista brutal de Rodrigo, pero también es un tipo muy inteligente», explicó ayer, en la presentación de la serie, Fernando Cayo. «Solo tiene un punto débil, su hijo Humberto. Es un tío calavera, que se mete en líos».

Cayo está encantado con este papel, que rompe con sus anteriores trabajos -fue el guardia civil de 'Punta escarlata' y es el anarquista de 'República' - y le permite recordar los viejos tiempos en los que formaba parte de la Compañía Nacional de Teatro Clásico.

Además, vuelve a coincidir con Juan Diego en una producción, aunque con los papeles cambiados. «Ahora el vasallo soy yo», dice con una sonrisa, recordando sus papeles en la película '23-F', en el que él hacia de don Juan Carlos y Diego del general Armada. Cayo cuenta que se inspiró en el 'Enrique V' de Kenneth Branagh para construir su Miranda. «Hay personajes movidos por grandes pasiones. También he visto series como 'Los pilares de la tierra' o 'Juego de tronos'».

La serie se graba en una nave de Fuenlabrada (Madrid) y en exteriores como la localidad segoviana de Pedraza. El set de rodaje ha sido acondicionado durante meses, en los que los especialistas han trabajado manualmente en el suelo. En este afán para recrear el Toledo de hace ocho siglos, el equipo de decorados tardó tres meses en diseñar una puerta. Antena 3 confía en que esta pueda ser su gran apuesta de ficción para el próximo año.

FUENTE: DIARIO VASCO (Daniel Roldán), 1 DICIEMBRE de 2011