LA DESCONOCIDA HISTORIA DE LA DIVISIÓN AZUL


El cineasta Gerardo Herrero filma un «thriller» con un asesino en serie y el asedio de Leningrado como telón de fondo
Inspirado en la novela de éxito El tiempo de los emperadores extraños, de Ignacio del Valle, el director Gerardo Herrero realiza un filme de intriga con la segunda guerra mundial como telón de fondo. La acción se sitúa en el asedio de Leningrado, donde participaron varias compañías de la División Azul. 

«Estaba buscando un thriller y me llego esta novela, cuenta Herrero en exclusiva para Levante-EMV; cuando la leí me sorprendió lo poco que conocemos sobre la División Azul. Eran voluntarios que se alistaron después de la guerra civil con el único objetivo de combatir contra el Ejército rojo. Hemos trabajado mucho consultando libros y documentales para respetar el rigor de los hechos reales».

«Hay elementos importantes que se muestran en esta historia, indica el cineasta, como son los recelos entre falangistas y militares, lo mal que se llevaban los soldados españoles con los alemanes, la relación con la población civil rusa y el ambiente que se respiraba entre los soldados». 

Otro hecho poco conocido que señala Herrero es que, una vez terminada la guerra civil, «comenzó una caza de brujas contra los masones, tanto de derechas como de izquierdas, este dato histórico aparece de forma sutil en nuestro argumento.»

Frente de Rusia, invierno de 1943, un pelotón de la División Azul se encuentra con el cadáver de un oficial asesinado. En el pecho lleva grabado a cuchillo un enigmático mensaje: «Mira que te mira Dios». El soldado Andrade, antiguo inspector de policía, se hace cargo de la investigación para encontrar al asesino. Pronto se desvelará que detrás de este crimen se encuentra una terrible venganza y que pueden aparecer más cadáveres.

«Todos los personajes viven con una simbólica soga al cuello, tambaleándose en la frontera intangible entre la vida y la muerte, señala el director. Están en medio de una guerra que está a punto de acabar. Todos ellos se mueven en un paisaje helado, constantemente cubierto de nieve y en el que reina la soledad, lo que se refleja en el estado emocional de los personajes: aparentemente son fuertes, pero si se les mira detenidamente puede verse lo frágiles que son en realidad.»

En la película se muestra una macabra fiesta en la que se practica la «violeta», una modalidad de la ruleta rusa. El protagonista de la reunión es el actor valenciano Sergi Calleja. El actor ha comentado para Levante-EMV, que el filme «muestra un escenario dantesco que es la guerra, donde su personaje —Tiroliro— es el más extremo de todos. Él tiene un conflicto íntimo que lo lleva a ser como es».

La película, que fue preestrenada en el Club Diario Levante, ha sido principalmente rodada en Lituania, para reproducir las condiciones extremas, con temperaturas de 25ºC bajo cero, que se vivieron en la realidad de los hechos. «Nuestro propósito siempre fue hacer una película que cautivase al público involucrándolo en el relato y apasionándolo, y, por otra parte, que la película reflejase una parte de la historia que los europeos y los españoles mismos desconocen en gran medida», concluye Gerardo Herrero.

FUENTE: levante-emv.com, 20 ENERO 2012