Queipo de Llano pasa revista a milicianos de Falange en Sevilla |
El ministro de Justicia, Alberto
Ruiz-Gallardón, ha expedido el título de marqués al nieto del general Gonzalo
Queipo de Llano, uno de los militares golpistas más sanguinarios durante la
Guerra Civil. La orden de renovar ese título, tras el fallecimiento del hijo
del general, se publicó en el BOE el pasado 17 de julio, 76 aniversario dela
sublevación militar que dio origen a la contienda. Para la Asociación para
la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) "es un insulto a las
víctimas de la dictadura y a la democracia que se otorgue desde el Estado ese
reconocimiento" a los descendientes de un militar que utilizó "una
despiadada violencia para conquistar el poder". "Un ministro de un
Gobierno democrático no puede colaborar en el reconocimiento público e
institucional a alguien que causó tanto daño a la sociedad", concluyen.
El general Queipo de LLano es autor de un
bando militar del 24 de julio de 1936 que anunciaba: “Serán pasadas
por las armas, sin formación de causa, las directivas de las organizaciones
marxistas o comunistas que en el pueblo existan y en el caso de no darse con
tales directivas, serán ejecutados un número igual de afiliados,
arbitrariamente elegidos”.También son suyas las siguientes declaraciones en
Radio Sevilla: "¿Qué haré? Pues imponer un durísimo castigo para
callar a esos idiotas congéneres de Azaña. Por ello faculto a todos los
ciudadanos a que, cuando se tropiecen a uno de esos sujetos, lo callen de un
tiro. O me lo traigan a mí, que yo se lo pegaré”. “Nuestros valientes
legionarios y regulares han enseñado a los rojos lo que es ser hombre. De paso,
también a las mujeres de los rojos que ahora, por fin, han conocido hombre de
verdad y no castrados milicianos. Dar patadas y berrear no las salvará”.
Para la Asociación para la Recuperación de la
Memoria Histórica "resulta un ejercicio de doble moral que la misma fuerza
política que exige condenas de la violencia acepte dar honores a uno de los
participantes en la mayor operación de uso de la violencia que ha existido en
nuestra historia, que llevó a más de 113.000 civiles a desaparecer, que violó a
miles de mujeres y construyó una dictadura edificada y sustentada siobre el uso
de una violencia sanguinaria y de un terror ilimitado".
No es la primera vez que la ARMH protesta por
la renovación de estos títulos nobiliarios concedidos por Franco. También fue
renovado, por ejemplo, el título de duque de Mola a los descendientes del
general golpista que el 19 de julio de 1936 ordenó a su ejército: "Es
necesario crear una atmósfera de terror, hay que dejar sensación de dominio
eliminando sin escrúpulos ni vacilación a todo el que no piense como nosotros.
Tenemos que causar una gran impresión, todo aquel que sea abierta o
secretamente defensor del Frente Popular debe ser fusilado”. En esta ocasión
fue un Gobierno socialista, el entonces ministro de Justicia Mariano Fernández
Bermejo, quien firmaba en el BOE la renovación del título nobiliario.
FUENTE: EL PAÍS (Natalia Junquera) 31 JULIO
2012